Arnau, un niño de 10 años responsable y autoexigente, comenzó el curso pasado a sentir malestar  y ansiedad ante la idea de iniciar el nuevo curso escolar. Durante las horas de clase empezó a sufrir problemas de concentración y según sus padres siempre estaba triste y lloraba continuamente por cualquier cosa, sólo la llegada del fin de semana mejoraba su estado de ánimo. 

 Arnau no se corresponde a ningún caso específico, sino la personalización que hemos querido generar para que podáis identificar la problemática que podéis vivir con vuestros hijos/as.

 Según datos recogidos en la Encuesta Nacional de Salud ENSE, el 19% de los niños de entre 5 y 14 años han sido diagnosticados de algún tipo de trastorno mental, siendo la depresión y los trastornos de ansiedad y de conducta los que tienen una mayor prevalencia entre este segmento de población.

 Otros datos preocupantes han sido publicados por UNICEF y la OMS donde tras diversos estudios académicos han determinado que más del 20% de los adolescentes de todo el mundo sufren trastornos mentales.

Se estima que el 4% de los niños sufre algún tipo de fobia escolar, y cerca del 70% requeriría de tratamiento psicológico.

Diferenciar entre fobia escolar y ansiedad por separación, en ocasiones puede ser complicado, ya que ambos son trastornos que pueden convivir al mismo tiempo y se relacionan con la vulnerabilidad de los niños en el afrontamiento de ciertas situaciones.

“Los datos son alarmantes, pero hay que tomarlos tan sólo como indicadores de situaciones que deben abordarse”

Es importante saber identificar si se trata de fobia escolar, ansiedad por separación o bien a otras causas, como dificultades de aprendizaje (dislexia, déficit de atención...) o conflictos emocionales. Si no intervenimos a tiempo, podemos estar frente a futuros fracasos escolares o el inicio de desarrollo de síntomas depresivos.

 Es muy importante ayudarles en éste tramo vital, ya que la conflictiva psicoemocional puede desorientaros en abordar la problemática real y es la única herramienta que disponen para solicitar ayuda ya que si les preguntamos por qué no desean ir al colegio, por términos generales no suelen saber respondernos, y si lo hacen suelen indicarnos que no les gusta alguna asignatura, problemas con algún compañero de clase, la comida del comedor, o bien miedo a algún profesor/a.

“Si no intervenimos a tiempo, podemos estar frente a futuros fracasos escolares o el inicio de desarrollo de síntomas depresivos.”

¿Qué síntomas podéis identificar si creéis que vuestro/s hijo/s han desarrollado fobia escolar?

 

  • Ansiedad ante la idea de ir al colegio
  • Bajo rendimiento escolar
  • Dificultades relacionales con sus compañeros/as de clase
  • Ataques de pánico o agorafobia
  • Dolores somáticos tales como dolor de estómago, cabeza o garganta,
  • Tristeza
  • Explosiones de mal humor y/o irritabilidad
  • Síntomas psicofisiológicos tales como diarrea, náuseas, vómitos
  • Trastornos del sueño tales como pesadillas, insomnio, vuelta a la cama de los padres, …

Habitualmente, los síntomas surgirán preferentemente por las mañanas, durante las horas previas a ir al colegio, mejorando en las horas intermedias entre clases, retomándolas por las noches al acercarse la vuelta al colegio. En muchos casos los síntomas a medida que avanza la jornada escolar suelen ir desvaneciéndose, así como en los períodos de vacaciones y fines de semana que desaparecen completamente.

 Para muchos niños y adolescentes, la vuelta al colegio les resulta un momento de estrés y ansiedad.

“Diversos estudios psicosociales indican que la mayoría de los niños y adolescentes que padecen de fobia escolar tienen problemas de autoestima o relaciones sociales”

Desde Institut Alba, aconsejamos a las familias que a la hora de afrontar la vuelta al colegio les animen a empezar de forma positiva y fomenten una autoestima positiva, que les permita reforzar sus cualidades y talentos para que se enfrente a los nuevos retos del nuevo curso, así como hablar con ellos si identifican la aparición de síntomas para determinar las causas que les está provocando ese malestar.

 Si vuestro hijo/a se niega a ir al colegio, y creéis que puede estar sufriendo fobia escolar, llámanos o envíanos un e-mail, podemos ayudaros. Nuestro equipo de psicología infantil enseñará a crearles herramientas para que sepa manejar los síntomas de la ansiedad, así como mantener reuniones periódicas con la escuela para hacer un abordaje interdisciplinar  que nos reporte más información y analizar los avances en terapia.

 

Meritxell Alcaraz Forte

Psicóloga colegiada núm. 13.018
Directora Institut Alba - Premià de Mar (Maresme)

 

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