¿Cómo Afecta el Uso Excesivo de Pantallas al Desarrollo Infantil?

El uso de dispositivos tecnológicos por parte de niños/as y adolescentes ha crecido de manera significativa en los últimos años, especialmente a raíz de la pandemia. Desde smartphones hasta tablets, la exposición a las pantallas es algo habitual en la vida diaria. Sin embargo, muchos padres, madres y educadores están preocupados por los efectos que este uso excesivo puede tener en el desarrollo cognitivo y emocional de los niños. Este artículo explora cómo las pantallas afectan el desarrollo infantil, los posibles riesgos y cómo los padres pueden establecer límites saludables.

Diversos estudios  demuestran que el uso prolongado de pantallas en niños y niñas  puede afectar a distintas áreas de su desarrollo:

1. Desarrollo Cognitivo: El tiempo excesivo frente a las pantallas puede limitar el tiempo dedicado a actividades importantes para el desarrollo cognitivo, como la lectura, el juego al aire libre y las interacciones cara a cara. Estas experiencias son esenciales para desarrollar habilidades de resolución de problemas, pensamiento crítico y creatividad.

2. Desarrollo Emocional: Los niños que pasan muchas horas frente a las pantallas pueden tener dificultades para gestionar sus emociones. Las redes sociales y ciertos contenidos en Internet pueden aumentar la ansiedad, la baja autoestima y otros problemas emocionales, especialmente cuando los niños aún no han desarrollado habilidades de autorregulación.

3. Desarrollo Social: La tecnología puede reducir el tiempo que los niños pasan interactuando con otros cara a cara, lo cual es crucial para el desarrollo de habilidades sociales como la empatía, la comunicación y el trabajo en equipo. La falta de estas interacciones puede afectar la capacidad de los niños para formar vínculos sociales saludables.

4. Problemas de Atención y Concentración:  El uso constante de pantallas, en especial videojuegos o videos de corta duración, puede contribuir a una menor capacidad de atención y a problemas de concentración en los niños. Esto ocurre porque la rápida sucesión de estímulos reduce su tolerancia a actividades que requieren concentración prolongada.

El uso excesivo de pantallas en niños y niñas puede tener varios efectos negativos en su salud física y mental:

• Alteraciones en el Sueño:  La luz azul emitida por las pantallas puede afectar la producción de melatonina, una hormona clave para el sueño, lo cual puede llevar a problemas de insomnio y afectar el descanso. La falta de sueño, a su vez, influye en el rendimiento escolar y el estado de ánimo.

• Problemas de Salud Física:  Pasar mucho tiempo frente a las pantallas puede contribuir a un estilo de vida sedentario, lo cual aumenta el riesgo de obesidad, problemas de postura y otros problemas de salud física a largo plazo.

• Aumento del Estrés y la Ansiedad:  La sobreexposición a contenido en línea, especialmente en redes sociales, puede incrementar el estrés y la ansiedad en los niños/as. La comparación constante con otros y el miedo a quedarse fuera de ciertas experiencias son factores que afectan su salud mental.

Para minimizar los efectos negativos del uso de pantallas, los padres pueden implementar ciertas estrategias:

1. Establecer Límites Claros de Tiempo:  La Academia Americana de Pediatría recomienda que los niños y niñas  de 2 a 5 años no pasen más de una hora al día frente a pantallas, y que los más mayores (pre-adolescentes y adolescentes )  tengan límites claros según la actividad y su edad. Es importante crear un horario que equilibre el tiempo de pantalla con actividades físicas y sociales.

2. Promover Actividades Fuera de las Pantallas:  Fomentar el interés en actividades fuera de los dispositivos, como deportes, lectura o actividades artísticas, puede ayudar a reducir la dependencia de las pantallas y ofrecer alternativas saludables para el tiempo libre.

3. Supervisar el Contenido y Promover un Uso de Calidad: No todo el tiempo frente a la pantalla es igual. Los padres y madres  pueden orientar a sus hijos/as  hacia contenido educativo y aplicaciones que promuevan el aprendizaje. Supervisar el contenido también permite evitar la exposición a material inapropiado.

4. Fomentar el Tiempo en Familia sin Pantallas:  Establecer momentos sin dispositivos, como la hora de la cena, ayuda a que todos interactúen y compartan experiencias sin interrupciones. Esto fortalece los lazos familiares y enseña a los niños a disfrutar de las interacciones cara a cara.

5. Educar sobre el Uso Responsable de la Tecnología:  A medida que los niños/as crecen, es importante enseñarles a usar la tecnología de manera responsable y consciente. Esto incluye ser conscientes del tiempo de uso, aprender a reconocer contenido perjudicial y entender la importancia de mantener un equilibrio.

Si el uso de la tecnología está afectando significativamente el comportamiento, las emociones o el rendimiento académico de un niño/a, puede ser útil consultar con un centro de psicólogia infantil como Institut Alba. Nuestro equipo de profesionales puede ayudaros  a implementar y desarrollar estrategias de gestión, proporcionando apoyo para reducir la dependencia de las pantallas.

El uso de pantallas en la infancia es una realidad que debe gestionarse de forma consciente. Establecer límites saludables y fomentar otras actividades es clave para asegurar un desarrollo equilibrado y saludable. Los padres y madres de Premià de Mar, Premià de Dalt, Vilassar de Dalt, Vilassar de Mar, Cabrils, Cabrera, Alella o el Masnou que estéis preocupados por el impacto de la tecnología en sus hijos podéis beneficiaros de la orientación de nuestro equipo de psicología infantil, a través de  herramientas que aborden este desafío tecnologico de manera positiva en vuestros hijos/as.